Ni siquiera la muerte podrá separarnos ...

lunes, 2 de febrero de 2009

¡Otra perlita!

En mi última entrada, comentaba que en estos meses de silencio por mi parte, los de la prensa (es un decir) culé no han parado de lanzar lindezas y exabruptos por la bocaza. Como hoy es festivo en las islas (festividad de la patrona de Canarias, virgen morena de Candelaria) y dispongo de algo de tiempo, dedicaré unas líneas a las simplonadas con las que Josep "Coldplay" González, subdirector del Sport, y fiel secuaz del siempre "verdadero" (y, by the way, racista) Josep María Casanovas, ha tenido a bien obsequiarnos tal día como hoy. Su columna, como todas las suyas rebosante de literatura y buen gusto, lleva por título Barcelonismo, barcelonitis y madriditis. Entresacaré las siguientes frases:

* Cuesta horrores (...) no mirar de reojo a nuestro acérrimo enemigo de Concha Espina y disfrutar al ver cómo deportivamente están varios pasos atrás y cómo reina el caos directivo e institucional.

* ... debemos dar muestras de señorío y respeto, (...) y no de apuntillar a un Madrid que yace agonizante y de rodillas en el ruedo.

* Cuesta horrores morderse la lengua y (...) no responder a los ataques de barcelonitis ni a las campañas fantasmas para fichar a tal o cual jugador.

Ante las cuales comentaré lo siguiente:

* Las dos primeras frases constituyen sendos y prístinos ejemplos de madriditis, preñadas hasta la obscenidad de desprecio y, por lo tanto, carentes del respeto que se pretende simular. En este sentido, el señor González se comporta como (es un ejemplo como otro cualquiera) el cura pederasta que desde el púlpito predica aquello de dejad que los niños se acerquen a mí.

* Las campañas fantasmas para fichar a jugadores del Barcelona (Messi ha sido el caso más reciente) han sido invención de la prensa culé (consúltese la columna donde Casanovas lanza su gitanada), las cuales fueron recogidas por la prensa de Madrid, y ello bastó para desatar los truenos en la capital del Principado. Consúltese también la entrada del 27 de enero pasado en La Libreta de Van Gaal. La culminación de tanta solemne soplagaitez fue obra del ínclito Joan Laporta quien, como buen y ejemplar nacionalista, tuvo que lanzar su famosa y victimista perorata en la que acusaba al Real Madrid (¿¿??) de intentos de desestabilización, empleando para ello dinero de todos los españoles, especialmente de los catalanes. ¡Con dos gónadas!

* Una última reflexión obligada: si el Real Madrid está poco menos que a las puertas de la muerte, siendo segundo clasificado de la Liga española, y a seis puntos del tercero (Sevilla F.C.), entonces... ¿qué cabe decir del resto de equipos (Sevilla, Villareal, Atlético, Valencia, etc.)? ¿La Santa Compaña, quizás?

Tan sólo al final de su ejemplar columna, el señor González se cura un poco en salud:

* Sabemos, por experiencia, que las crisis Barça-Madrid, Madrid-Barça van y vienen como el Puente Aéreo y que, como ha dicho el propio Guardiola, el prestigio cuesta mucho ganarlo y poco perderlo. (...) Y algún día volveremos a ser feos...

En resumidas cuentas, el poco sentido común de Josep González depende directamente del que demuestra Pep Guardiola, bastante más sensato, mesurado y ecuánime que el columnista, por extensión y en contra de su propio criterio, afectado de madriditis galopante, enfermo hasta la médula de barcelonitis profunda, y completamente exento del barcelonismo con seny que reclama para sí y que encima, y desvergonzadamente, recomienda a sus lectores. Todo esto lo dice alguien que ni es, ni al parecer nunca será, guapo.

He dicho.

No hay comentarios: